miércoles, 10 de febrero de 2021

Corrupción y fraude (35) Paco Sanz, el fraude de los dos mil tumores

Se celebra en estos días el juicio por el caso de fraude continuado de Paco Sanz, el supuesto enfermo que decía tener una grave enfermedad genética casi terminal, el Síndrome de Cowden, que entre otras desgracias, le había provocado tener en su cuerpo más de 2.000 tumores. De esta forma en 2010 lograría convertirse en un personaje público gracias a esta supuesta dolencia. 

Sanz decía que el tratamiento para poder curar su dolencia solo podía recibirlo en Estados Unidos, lo que convirtió en el anzuelo perfecto para recolectar donaciones a través de Internet, por libros y otras recaudaciones públicas aunque todo era un teatro en el que también implicaba a su pareja y a sus padres.

Desde 2010 hasta su detención en 2017 grabó más de un centenar de vídeos llenos de quejas y lamentos, convirtiendo su fraude en un trabajo a tiempo completo: en ellos contaba cómo sobrellevaba la enfermedad, el dolor que le causaban sus síntomas y el coste económico de su tratamiento, pero a la vez y llevado por su soberbia, tras los vídeos en los que buscaba dar lástima seguía grabando las burlas e insultos dirigidas precisamente a quienes estaban intentando ayudarle, burlas que eran cortadas antes de la publicación del vídeo. Estas crueles mofas han salido ahora a la luz mostrando su alma miserable.


Mordieron el anzuelo famosos como el exdeportista Pedro Aguado, el humorista José Mota, el periodista Nacho Carretero... fueron víctimas de su estafa más de 8.000 personas anónimas que se solidarizaron con el falso moribundo, haciéndole ganar una fortuna, más de 300.000 euros, dinero que se gastó en ropa de grandes marcas, coches y artículos de lujo. 

Este caso, además del enésimo episodio de lo peor de la mítica picaresca española, ilustra tristemente las costumbres y valores de nuestro tiempo, el dinero por encima de todo y a cualquier precio. No importa engañar, no importa mentir, da igual jugar con la buena voluntad de las personas si se trata de hacer dinero. 

Paco Sanz se enfrenta ahora a seis años de prisión, los que pide para él la Fiscalía por un delito continuado de estafa, pero las acusaciones particulares van más allá y piden para él 24 años de cárcel. Esperemos pague por sus delitos, por su cruel abuso de la solidaridad de todos los que quisieron ayudarle. Gentuza así sobra. 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario