
El realizador Pau Vergara deja que sean algunos de los que sobrevivieron a ese horror quienes nos hablen del hambre, del trabajo extenuante en las canteras, de las vejaciones continuas, de la anulación de su personalidad, de los asesinatos arbitrarios, de los compañeros que no resistían más y se lanzaban contra las vallas electrificadas, de las chimeneas donde se incineraban los cadáveres, del olor a carne quemada que se extendía por los campos de trabajo. Pero también nos hablan de la solidaridad entre españoles, de cómo se organizaban entre ellos, de cómo lograron resistir, del día de su liberación por parte de tropas norteamericanas. Estos supervivientes del infierno nos enseñan sus fotografías, sus recuerdos, nos cuentan sus pesadillas aún recurrentes sobre aquel lugar nefasto, nos enseñan la parte de sí mismos que se quedó dentro de las alambradas.
Sé que tú ya lo hiciste, pero animo a todo el que le interese el tema a que lea la "Trilogía de Auschwitz" de Primo Levi. Si yo fuera ministro de Educación haría que su lectura fuera obligada en las escuelas.
ResponderEliminarUn saludo
Efectivamente, así debería ser. Junto con Sefarad, de Antonio Munñoz Molina, otro libro que debería imprescindible en la educación de los chavales. Espero que cuando crezca tu simpático retoño, aparte de ponerle temazos pop, le pongas estos libritos en la estantería. Saludos.
ResponderEliminar